Por Elizabeth Aguilar
En el artículo anterior, hablé sobre la importancia de sacar un tiempo solo para la pareja, lo cual nutre la relación y beneficia a toda la familia. Muy distinto a ello es una modalidad actual que está afectando gravemente a la familia y en especial a los hijos, y consiste en que cada esposo reclama su espacio y su tiempo independiente de la familia: ella sale en la noche con sus amistades y él con las suyas, o simplemente debe quedarse con los niños mientras su pareja sale a divertirse hasta altas horas de la noche o regresa al día siguiente.
Ellos no te pidieron que los trajeras al mundo, tú lo hiciste y es tu responsabilidad cuidarlos y hacerlos felices pese a tu estudio, tu trabajo y compromisos sociales, a los cuales sí hay que asistir de vez en cuando, pero sin afectar el tiempo de tu familia.
Tu pareja y tus hijos deben ser lo más importante para ti. El tiempo que puedas dedicarles, en especial cuando están pequeños o adolescentes, no se reemplaza con todo el oro del mundo.
El tiempo vuela y los hijos crecen y se van de casa, llevándose todo lo bueno y lo malo que recibieron de sus padres. Permíteles volar con los mejores recuerdos, en especial con los valores y buenas costumbres que sembraste en ellos. Dedícale tiempo con mucho amor a tu familia y a cada uno de forma especial e individual. Ellos te necesitan.
¿Que tienes que hacer un trabajo en grupo de la Universidad? Recíbelos en tu casa.
¿Que papá va a practicar su deporte favorito? Que lleve a su familia.
Que quieres compartir con tus amigos? Invítalos a tu hogar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario