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Cocine y combata el estrés 
por  Lily Mosquera de Jensen

En una reciente revista Science, apareció un artículo sobre el descubrimiento hecho por el Premio Nobel, Doctor Daniel Kahneman, de la Universidad de Princeton, de un método para medir las características de las experiencias de la vida diaria, que ha sido llamado “La cuenta del Bienestar del País”. El resultado de sus investigaciones revela que el hecho de preparar una comida en casa está entre las actividades que hacen más feliz a un ser humano, hombre o mujer.
Y entre las actividades que lo hacen mas infeliz está conducir su carro de su casa al trabajo. Aunque estos estudios corresponden a la sociedad norteamericana, con sus sistemas de vida con mas tecnología, con sus grandes autopistas repletas de tráfico, inevitables para la gente que atraviesa grandes distancias de su casa al trabajo, creo que nosotros no nos quedamos atrás en cuanto al tráfico detestable y congestionado, con calles llenas de huecos y desorden por todo lado, que sin duda nos sube el nivel de estrés y nos daña el genio.
También leí un comentario sobre la propaganda de una joyería que dice “un diamante es para toda la vida” y la autora le añadía: “pero una buena comida es para la felicidad”. Sin duda esta glosa tenía que venir de una cocinera.
Yo lo corroboro con mi experiencia de muchos años funcionando en mi cocina, mi “despacho privado”, como yo lo llamo, donde he podido disfrutar de momentos gratificantes mientras mezclo ingredientes, revuelvo, amaso, horneo y preparo algo delicioso, algunas veces en compañía de mis hijas y nietos. La recompensa siempre es satisfactoria y estimulante.
Cocinar para las personas que uno quiere, la familia y los amigos, es la actividad que produce mas gusto, placer, tranquilidad y alegría, dicen las investigaciones del Premio Nobel. Cada vez lo compruebo más, que al obsequiar algo preparado con mis manos, la persona a quien se lo ofrezco, manifiesta un agradecimiento especial, como si le hubiera hecho un homenaje. Esto es muy gratificante.


Con estos argumentos que, como pueden ver, son científicamente comprobados, aconsejo con insistencia que si quieren liberarse del estrés que se acumula por ejemplo en época de Navidad, hagan el plan de meterse en su cocina y preparar en casa algunos de sus obsequios, galletas, tortas, encurtidos, vinagres aromatizados, nueces acarameladas, dulces, que con un bonito empaque, sus amigos agradecerán mas que nada, ya que todas estas preparaciones llevan el mejor de los ingredientes: el amor.
Además, para expresar un sentimiento a un amigo, en cualquier época del año, ya sea de solidaridad, felicitación, pesar, gozo, bienestar, nada mejor que acompañarlo con algo de su cocina, en cuya preparación ha puesto todos sus deseos sinceros, llenos de amistad y cariño. Lo he comprobado mil veces cómo la persona que recibe algo de mi cocina, no lo puede olvidar. Ni yo tampoco. Creo que la carga de energía que lleva el amor metido en el pastel, hace maravillas.

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